LA SUERTE TRAIDA DEL INFIERNO

 

 

 

Cuando Jose y Yoly nos trajeron su moto, una DYNA FAT BOB de origen a la cual únicamente se le había cambiado el filtro original por un Screamin Eagle, y la pusieron a nuestra disposición, únicamente teníamos tres cosas claras, tenía que ser negra, muy negra!!!, tenía que ser gorda, muy gorda!!! y tenía que estar pintada con unos motivos que para ellos significaban mucho.

A partir de aquí se empezó a trabajar en la moto en dos partes, una mecánica y la otra enfocada a la pintura.

En el frontal de la moto se han cambiado todas las ópticas, manillar, puños y fuelles, pero destacando el foco con rejilla colocado en diagonal, y de forma más significativa el masivo manillar hecho a mano, que le dan a la moto un aspecto brutal por delante.

 

 

 

Las estriberas de dos tipos encajan a como un guante con los puños, aunque las de atrás al estar hechas a mano por Jose y pintadas en negro son un detallazo en la moto.

La visión lateral de la moto es súper compacta ya que las llantas se han acabado en color negro, y están acompañadas en el lado izquierdo por la polea negra, el cubre correas perforado de color negro y la ausencia de cubre correas inferior.

En el lado derecho tenemos el filtro Screamin Eagle, y todo el conjunto de escape con los colectores forrados con anti calórica negra y unos cubre colas de fabricación casera taladrados y pintados en negro.

 

Se ha cambiado el guardabarros trasero, por otro más corto de Harley Davidson, para dar un aspecto más redondo a la moto, y se ha rematado con la reubicación más deportiva de la matrícula y el cambio de los intermitentes originales por unos tipo bala.

Por último se ha dado un perfil más bajo a la moto cambiando la amortiguación original por unos progresive, que en conjunto con el asiento Lepera Bare Bones prácticamente tiran la moto al suelo.

En la parte de pintura la moto ha perdido todo su color negro brillo combinado con cromados, para dejar paso a un negro mate/satinado de base en las piezas más pequeñas o complementarias, y un negro mate en las tres partes principales. Siempre eso sí, dejando algunos detalles cromados para darle brillo a la pintura general.

Tanto deposito, como guardabarros se han pintado a pincel combinando unas llamas rojas, una calavera y una mano, llenas de simbología y significado, sobre el cual no vamos a hablar, si queréis saber tendréis que preguntarle a ellos.

 

 

Con todo esto hemos pasado de una FAT BOB prácticamente de origen, a una moto en la que cuesta definir qué modelo es, y que se intuye por el chivatazo que nos dan las llantas.

El resultado lo ha de valorar cada uno a través de las fotos o viendo la moto al natural, nosotros hemos preferido valorar el resultado del trabajo, al destapar la moto y ver sus caras.

 

A los dos damos además las gracias por confiar en nosotros ciegamente.

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